El mago introduce al espectador en un show de magia a lo grande al más puro estilo “Las Vegas” en el que nunca se sabe lo que va a pasar. Los asistentes vibran envueltos entre apariciones, desapariciones y levitaciones inverosímiles, hasta llegar al número estrella de la actuación, uno de los más peligrosos y emocionantes que nunca se han visto sobre un escenario en directo, y que muy pocos magos se atreven a afrontar.